Un grupo
de especialistas internacionales dedicados a investigar sobre cáncer en
páncreas y mama ha comenzado a estudiar tejido de tumores humanos (de cáncer en
páncreas y mama) que han sido inoculados en ratones a fin de probar nuevas
terapias y medicamentos.
El
estudio consiste en “tomar” una porción de tejido de un tumor cancerígeno de
una persona e introducirlo en el ratón, a la espera que el mamífero lo
desarrolle por completo. Una vez logrado el ciclo, se le extrae y divide.
La
investigación se enfoca al cáncer de páncreas y mama. El primero porque las
personas que lo padecen tienen una supervivencia del cinco por ciento, es el de
peor pronóstico y no hay tratamientos. Y el segundo porque el 50 por ciento de
las paciente no responde al tratamiento.
Hay animales de laboratorio en los que el tumor se
“retrae” con algún fármaco. “Hay muchos ratones que han muerto, pero en otros,
el tumor se retrae, y como a cada ratón se le dan fármacos que hay en el
mercado para acortar tiempo, sí ha funcionado en cáncer de páncreas, aun cuando
el medicamento estaba destinado a cáncer de mamá, y si funciona quiere decir
que la acción que ejercen los genes en el caso de la patología de páncreas es
parecida a los de mama”.
Es posible que resulte más rápida obtener resultado por medio de inculación que en los otros estudios que se hacen (por ejemplo, con ensayos clínicos), porque este procedimiento es rápido y quizá más económico al trabajarse con ratones de laboratorio.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario